Un poema muy especial que he oído en mi casa recitar ,no solo una vez si no un centenar, y no me arrepiento, por que es una tradición a esperar ,lo recita mi abuelo con gran entusiasmo y un sin parar ,no lo recita solo en casa ,si no en cualquier lugar, que se hace desear ,la gente lo alaba y le dan toda su atención , pues es un maravilloso recitador.
Me siento orgullosa de tener en mi familia a Abelardo Hernández Martín que sin leer el poema lo recita de memoria.
PARA TODAS LAS MADRES
No hay cariño en el mundo más grande que el de una madre.
Te crían con ilusión, no hay nada que se compare, siempre pendientes están ,desde el momento que naces.
Te crían sin egoísmo, para más sacrificarse.
Ahora , la realidad, los hijos se han hecho grandes,
ya la miran con desprecio, ya no parece su madre.
Está vieja y achacosa, ya parece estorbarle.
Levanta la cara hijo, contempla bien a tu madre,
esto ha quedado de mí porque tú te lo llevaste.
Ahora tienes una mujer, y unos hijos que te amen.
Y comprenderás con dolor cuando tus hijos te llamen, que lo mas grande del mundo, es:
EL AMOR DE UNA MADRE.



